lunes, 18 de agosto de 2014

Tres María por el Pomo

Nos quedaron las ganas de hacer el Tres María por el Pomo y hoy por la mañana fuimos a recorrerlo.
Fue Miguel quién nos guió por la quebrada correcta y lo seguimos Francisco, Ana y yo. 
Esta vez si fue familiar el recorrido aunque algo distinto por los desmoronamientos que hubieron, pero la quebrada en sí mantuvo su aspecto. Paredones estrechos, subidas por rocas, partes coloradas, poca vegetación, trepadas abruptas. Por momentos recibí la ayuda de Miguel para poder continuar por la dificultad del terreno, sin embargo estuvo muy atractiva la subida.
Llegamos al sendero que se une con el habitual que lleva al Tres Marías, pudiendo ver la cruz de su cumbre. Aquí Ana y Miguel se adelantaron, mientras que Francisco y yo seguimos a nuestro ritmo.
Llegamos a la cima del cerro y se pudo apreciar toda una vista panorámica de la zona. Conversamos, cominos e hidratamos y comenzó nuestro descenso al trote. Nuevamente Ana y Miguel se adelantaron y quedamos como rezagados Francisco y yo que nos cuidábamos en las partes más escabrosas.
Todo el trayecto de bajada nos encontramos con varias personas que aprovechando el feriado y el día maravilloso salieron a hacer treking por el cerro y muchas más se vieron en la base del Tres Marías con sus bicis.
Fue un día primaveral con una temperatura cercana  a los 30°, sin nubes ideal para la práctica deportiva.

Ingresando a la quebrada







Quebrada el Pomo





Dejando la quebrada

Camino a la cumbre

En la cumbre