Fuimos pocos, ya que la mayoría habían participado de la carrera en Barreal. Sólo dos mujeres y cinco varones. La concentración como siempre en el M. Quiroga. Yo me sumé a la decisión del grupo que era hacer el circuito de reconocimiento denominada "El Rancho", ya que ahí se llevará a cabo la próxima fecha de Mtb.
La entrada la hicimos por El Pinar, sorteando el río dos veces y luego ingresamos al diferimiento. Al poco andar encontramos la señalización del circuito y encaramos la primer subida con la bici al lado o en los hombros, ya que era imposible andar en ella. A partir de ahí piedras, ripio suelto, subidas y bajadas y antes de meternos por el cauce del río, pinché la rueda trasera; en vez de lamentarme, agradecí que sucediera ya que me vino bien para poder descansar.
El camino por el río resultó tedioso y más aún porque nos estábamos quedando sin agua. El grupo se dividió en dos: los que participarán de la carrera y que por consiguiente iban muy rápido, y el otro: Edu Narváez y yo, que ibamos más tranqui pero no menos exigidos.
Durante este trayecto nos pasaron otros bikers y hasta nos hicimos compañía con uno, dado que desconocíamos el lugar y si bien seguíamos las marcas "verde" por ahí dudábamos en las bifurcaciones. Tuvimos suerte en la elección del camino ya que nunca nos perdimos. Por momentos debíamos caminar con la bici al lado y hasta hubieron subidas que nos costó llevarla de la mano.
Este circuito la concluimos llegando a las Lomas de Las Tapias, pasando el ingreso al complejo Bahía. La cuenta del cronometraje fue de 40 km y a eso le debo sumar unos 8 km más ya que salí desde mi casa.
Por momentos estuve a punto de desistir, sentía que se me acababan las fuerzas, estuve cerca de desmayarme del esfuerzo que implicó este circuito; pero aún así mi deseo de terminar, de llagar a destino pudieron más. Fueron casi 5 horas de pedaleo agobiantes. Es la primera vez que termino exhausta después de andar en bici y con una sensación de... qué paso? Será el cansancio acumulado de varias noches de dormir poco y nada? será que a mi edad ya no estoy en condiciones de semejante esfuerzo? será que mi baja de peso afectó mi rendimiento? será la bicicleta que no acompaña para este tipo de recorridos? será que el calor y la falta de agua provocó este agotamiento? será que no estoy suficientemente entrenada para estos retos? Lo cierto es que en muchas ocasiones sentí la satisfacción de la salida, del cansancio, del entrenamiento, del dolor después del esfuerzo, pero esta vez....no pude decir lo mismo!
